¡Estas Fuera!

El Baseball políticamente correcto se va



Por Keith
Hace años atrás, cuando mis hijos eran pre-adolescentes, me gustaba promover actividades para que sean sociables y que hagan ejercicio. Boy scouts, Chicas guías y baseball eran mis apuestas seguras con pocas lesiones y buena exposición al ejercicio. Me gustaba estar envuelto con mis hijos y no era difícil, siempre hay espacio para padres voluntarios. Lo que yo realmente disfrutaba era el baseball. Es una oportunidad para que los niños se relacionen y participen en un nivel mucho mayor que el de sólo presentarse.

Puede ser mi opinión personal pero parece ser que los niños están demasiado manejados; con demasiada frecuencia están en ambientes que dirigen cada uno de sus movimientos. Pienso que para que los niños aprendan necesitan ocasiones en las que puedan salir de las instrucciones constantes y aplicar lo que saben. Ahí es donde el talento se esconde en los niños, donde ellos puedan mandarse a si mismos. Los deportes son una oportunidad para eso, le permite a los niños pensar en el momento, tomar decisiones rápidas mientras se mueven y recibir retroalimentación inmediata por sus esfuerzos.

He visto algunos niños talentosos y me he quedado con la impresión de que sus talentos vienen no de pensar demasiado en las instrucciones que se les da. Es como un flujo natural que viene de la confianza y del esfuerzo. He llegado a creer que el talento real es motivado en lugar de ser manejado.

Fui umpire en un juego para niños de 10-12 años de edad. El pitcher estaba lanzando buenas bolas y después de 4 entradas el coach lo puso a descansar. Su reemplazo estaba muy ansioso, así que le di un par de lanzamientos para que caliente y entonces llamé al bateador. En este juego no me molesté en traer mis protectores para las canillas, deduje que un niño de 12 años no podría lanzar demasiado fuerte.

Me senté detrás del cátcher y ordené que continúe el juego. El Pitcher lanzó su primera bola y no pude creer lo que vi. Para cualquiera que no piense que los deportes pueden ser tan hermosos como el arte, están equivocados. Este niño lanzó una bola curva perfecta. Estoy hablando de la perfección y estoy hablando de arte. Estoy hablando de ver lo imposible suceder enfrente de tus ojos; física limpia y perfecta. Este fue un lanzamiento ejecutado de manera hermosa en la caja y los rompió hacia fuera. Sólo hay dos lugar en el universo en donde puedes ver esa perfección con tus propios ojos y yo estaba parado en uno de esos lugares.

Gracias a Dios el bateador intentó golpearla. Yo estaba atontado y un poco desubicado cuando declaré que era un strike. Inmediatamente pedí tiempo fuera y di una caminata en la montura.. Había un silencio mortal en el campo y levanté mi cabeza para mirar al pitcher a los ojos.
“Bonito lanzamiento hijo. ¿Cómo hicieste eso?”
“¿Qué hice señor?”
“Hijo, ¿Crees que puedes hacer el mismo lanzamiento otra vez? Exactamente el mismo, por favor”
Regresé a mi posición y di la orden de que el juego continúe. Otra vez el mismo lanzamiento, excepto que ya no había sorpresa, yo estaba esperándolo y miré todo el proceso.
Pedí tiempo fuera y salí de la montura otra vez, esta vez llame al entrenador para conversar.
“No señor,” dijo el entrenador.
“Entonces, usted sabe de lo que estoy hablando ¿Cierto?”
“Si señor,” dijo el entrenador
“¿Sabe usted que en esta liga ese tipo de lanzamiento está prohibido?”
“¡No señor, yo no lo sabía!”
“Bien, déjeme decirle porque. Poner un estrés tremendo en el hombro, el codo y la muñeca. Para un niño joven puede causar mal formaciones en su brazo en las articulaciones y causar dolor de por vida.”
“Hijo, si veo ese lanzamiento otra vez estás fuera del juego. Hijo, tengo que reportarte a la liga de los umpires para que sepan que deben de tenerte en observación.”
“Quiero que sepas algo hijo. Ese lanzamiento vale un millón de dólares y si te dejo usarlo nunca te los van a pagar porque vas a arruinar tu brazo. Espera a que tengas 20 y entonces úsalo. Probablemente voy a hacerte famoso.”

Estreché la mano del niño y le agradecí por mostrarme algo que pensé que era imposible.
“Hijo, esto ha sido un honor.”

Le pedí a una pareja de padres si estaban dispuestos a ser umpires de un juego la próxima semana en una liga más joven, de niños de8-10 años. No vi el punto. Ellos era demasiado jóvenes para saber las reglas, pero aparentemente ellos querían que yo cambie el comportamiento de los padres. Estuve de acuerdo. Yo sabía muy bien que rápido puede un padre arruinar un juego.

Cuando me presenté noté que los niños estaban un poco sedados. Me resultó extraño que había tan poco entusiasmo. En el home, la conferencia de los coaches se me dijo que el juego solo tendría 4 entradas de modo que los niños estén hasta tarde fuera de casa.
“Me parece bien,” dije, “empecemos, estamos desperdiciando su tiempo.”
Llamé al primer bateador y miré al coach, el detuvo a su jugador y dijo, “no hagas swing. Camina.” Rápidamente me di cuenta que no había un solo niño en el campo que pudiese poner la bola en la zona de strike. Los coaches y los padres habían predeterminado quien ganaría el juego al lanzar una moneda. Es imposible que yo permita que eso sucediese.

Pedí tiempo fuera y traje a los coaches al home.
“OK chicos, aquí está el trato, voy a expandir la zona de strike. Si el bateador puede alcanzar la pelota sin mover sus pies es un strike. Si está en el piso y la pueden alcanzar sin mover los pies es un strike. Así que regresen y díganle a sus jugadores que mejor será que hagan swing o los voy a sacar. Si no les gusta lo que he dicho me voy de aquí. O estos niños juegan o me voy.”

Ellos sabían que yo hablaba en serio cuando el primer bateador se fue con 3 strikes y sin bolas. Por supuesto que el niño se enojó, el nunca había jugado antes. Hey, bienvenido a la niñes. Hacer nada puede ser frustrante. El Segundo bateador entendió el mensaje y logró pegarle a la bola se fue para abajo y fue hacia adelante un par de pulgadas, él no sabía que hacer. De hecho nadie sabía y los jugadores se congelaron. Eventualmente los gritos del coach dirigieron al bateador a que corra a primera base.

Esa es la mágia para los niños en los deportes. Primero lo intentas y eventualmente tienes éxito, sin embargo, cuando tienes éxito estas confrontado inmediatamente con lo que viene a continuación. Para aquellos que no reconocen que al proceso se lo llama vida. Mucho antes de mencionar las políticas del esfuerzo de equipo, en algún momento los niños necesitan aprender a hacer un esfuerzo y el porqué. Es la recompensa de ser desafiado y de desafiarte a ti mismo hasta que tengas éxito.

Este fue el mejor juego del cual jamás haya sido umpire y fue mejor que nacer de nuevo al estilo Cristiano. Estos niños estaban trabajando, estaban relajándose y lo estaban intentando. Por supuesto, muchos de ellos fallaron con strikes y jugamos 6 entradas en lugar de 4. Pero lo que escuché de las bancas valió cada minuto.
“Hey Johnny ¿Me viste pegarle a la bola?”
“Tan sólo haz swing Johnny. Muy pronto le vas a pegar.”

Por supuesto que los coaches y los padres ahora le decían a los jugadores como jugar y que hacer y ellos estaban escuchando. Ellos querían saber. No vi a ningún niño sentado en el campo o fuera del campo, este era un juego en el que ellos estaban concentrados y el juego era de ellos. El entusiasmo lavó a los niños y salpicó a los adultos y yo adoré cada minuto de esto.

Lo que ellos habían estado haciendo es dejar que los bateadores caminen cada vez. Les decían a los niños que no hagan swing. Ellos sabían que los niños no podían lanzar a la zona de strike y habían optado por un juego de caminar. Ellos podrían calcular el resultado final cuando el juego empezó.
Era patético.

Los niños estaban aburridos y no estaban interesados. Estos estúpidos adultos habían destruido al juego y a la experiencia de aprendizaje, pero hoy no fue así. Al final del juego, los coaches me dejaron saber que no volvería a ser umpire en esa liga. Un par de niños jóvenes se me acercaron y me preguntaron si podrían jugar en mis juegos.

Lo siento chicos, no funciona así, pero ahora lo saben… si lo intentan, entonces tenemos un juego.
http://www.avoiceformen.com/2011/06/20/youre-out/

Comentario de Daniel Martínez: Este artículo es simplemente hermoso, es una muestra de la sabiduría de los hombres. Nosotros no somos unos brutos, es más podemos enseñar muchas cosas buenas a los niños. La competitividad es parte de nuestra identidad y por Dios esto hace la vida muy divertida. Somos tan leales a nuestros equipos favoritos y eso hace la vida tan interesante, de repente las mujeres podrían aprender eso de nosotros.

Por cierto, he estado teniendo problemas de Internet últimamente, por eso he publicado poco, pero estos problemas se van a solucionar eventualmente.