viernes, 13 de agosto de 2010

Cuando las feministas piden privilegios femeninos, terminan lastimando a las mujeres

Por Joe Zamboni

A través de los estados unidos vemos a las feministas radicales presionar para que obtener más privilegios. Las mujeres reciben manuteción después del divorcio, pero los hombres normalmente no, a pesar que en estos días se supone que las mujeres y los hombres son iguales. Las mujeres se benefician de programas de cuotas preferenciales en las universidades y en los trabajos, a pesar de que se supone que son tan capaces como lo son los hombres. Las tecnologías disponibles de control de la natalidad les da mucho más opciones a las mujeres que a los hombres, a pesar de que los hombres están supuestamente controlando las corporaciones que investigan y desarrollan estas tecnologías. La lista de privilegios femeninos que existen en la actualidad es muy grande, lo que he mostrado hasta ahora no pretende ser una lista exaustiva, pero si trata de mostrar como son las cosas.

Lo que las feministas radicales fallan en notar es que mientras más presionen por privilegios femeninos, más se adoctrina a las mujeres a que se vean a si mismas como niñas y que actúen como tales. Esto termina debilitando a las mujeres, porque se las incentiva a ser receptoras flojas y complacientes quienes viven en un mundo de fantasía. De acuerdo con el sistema, los hombres siempre deben de ser adultos, proveedores, portectores, lógicos y racionales, los que se enfrentarán a la verdad. En lugar de hacer a las mujeres “más iguales” a los hombres, lo que estos privilegios hacen es remarcar el hecho de que las mujeres no creen que pueden lograrlo por si mismas, que necesitan más ayuda de los hombres. Esto se mezcla con los slogans del feminsimo radical como “una mujer necesita a un hombre tanto como un pez necesita una bicicleta”. Lo que todos esos privilegios logran es transmitir fuerte y claro el gran deseo de las mujeres por seguir siendo niñas, que los hombres las cuiden (ya sea de forma directa por los padres o por sus esposos, o de forma indirecta, por el gobierno a través de los impuestos pagados por hombres.)

Estos privilegios femeninos existentes y aquellos por los que se está luchando con fuerza, no liberan a las mujeres. De hecho crean un sistema que continúa comunicando que las mujeres son vulnerables y dependientes. Estos privilegios no les da más libertades a las mujeres, sino que atrapan a las mujeres en seres sobreprotegidos. Estos privilegios convierten a las mujeres americanas en lo que las mujeres chinas hace unos cuantos cientos de años, mujeres con los pies rotos, atados y grotescamente distorcionados, mujeres incapaces de caminar grandes distancias. Las mujeres americanas y las de la historia china son incapaces de cuidar de si mismas y también son incapaces de hacer lo que es necesario. Ambas fueron lesionadas por el sistema.

Cuando analizo esto desde una perspectiva amplia (el gran número de áreas de la vida normal que están cubiertas) y cuando veo la injusticia y el favoritismo (la gran carga que se pone en los hombros de los hombres), concluyo que los privilegios para las mujeres generan molestias y decepciones para los hombres. Sin embargo hay otra perspectiva. Este sistema alienta el comportamiento responzable, cariñoso y generoso de los hombres. Este sistema incentiva a que los hombres maduren y se enfrenten con las verdades de la vida, puesto que la mayoría de nosotros tenemos que luchar para ganarnos el pan de cada día. En otras palabras el efecto neto de este sistema de privilegios femeninos es entrenar a las mujeres para que sean niñas irresponsables y entrenar a los hombres para que sean adultos responsables.

Ahora ¿Por qué razón los hombres podrían querer esto? Si los hombres se retiracen de los acuerdos que los esclavisan. como por ejemplo, el matrimonio, entonces las mujeres no serían capaces de cuidar de si mismas, ellas se encontrarían en una posición precaria, vulnerable y peligrosa. Por ejemplo, si ningún hombre se casase con una mujer feminista quejinchosa (que se queja mucho), entonces ella se va a ver forzada a luchar para mantener un trabajo, ella se va a ver forzada a pagar por sus propias cuentas, se va a ver forzada a hacer el tipo de cosas sucias, molestosas y peligrosas que de otra forma las haría un hombre en la ya fallecida era de la caballerosidad.

Otro de los acuerdos que esclavisan a los hombres para que cuiden de las mujeres son los trabajos en las agencias del gobierno o en las grandes corporaciones. A través de las leyes de acoso sexual y las regulaciones, las políticas de contratación y promoción de mujeres, practicar el “ten sexo para llegar a la cima” y otras estructuras anti-hombre, se les da luz verde a las mujeres, de hecho se las incentiva a ser receptoras flojas irresponsables e incompetentes. Si los hombres se negacen a participar en estas organizaciones, al inciar sus propios negocios, por ejemplo, entonces pueden liberarse de esos acuerdos esclavisantes. Sin embargo si es que un gran número de hombres se negace a participar en estas organizaciones, entonces veríamos que las mujeres no serían capaces de manejar estas organizaciones sin los hombres. Las mujeres no serían capaces de manejar estas organizaciones con la disciplina, el compromiso, la auto-responsabilidad y la tenacidad que es necesaria. El resultado será la falla o al menos una gran pérdida de competitividad en estas organizaciones. Este fenómeno está muy bien ilustrado por la reciente exposición escrita por una mujer quien quería iniciar su empresa productora de televisión formada sólamente por mujeres en inglaterra. Su experimento fue un desastre sin límites con muchas mujeres, diciendo que merecían un trato especial, muchas mujeres usaban las horas de trabajo para chismes o criticarse la una a la otra y muchas mujeres se rehuzaban a hacer el trabajo que tenía que hacerse.

De modo que si piensan un poco en el como son las cosas, verás que los hombres no estamos en una posición tan mala - es decir, si consideras que es lo que han creado esos privilegios. Han creado un gran grupo de mujeres adultas quienes en la gran mayoría de los casos actúan como niñas, quienes no pueden enfrentarse al mundo real, quienes viven en un mundo de fantasia. También han creado un grupo de hombres quienes actúan como adultos responsables y como padres, no sólo para los niños, sino que para las mujeres también. Ahora remueve esas estructuras que mantienen esos favoritismos y privilegios (el matrimonio, trabajos en corporaciones grandes, escuelas que le enseñan a los hombres a ser sirvientes, etc) y ¿que tenemos entonces? Tenemos hombres con poder quienes pueden irse y hacer alguna otra cosa. Y tenemos también mujeres sin poder quienes en muchos casos no pueden hacer ni una maldita cosa que sea útil para el mundo, quienes verdaderamente no entienden que significa se responsable, quienes han pasado gran parte de su tiempo quejandose de problemas inexistentes, quienes se dan cuenta rápidamente que todo este experimento feminista ha sido una distorción de la realidad.

Lo cual nos lleva a la estrategia sugerida para los hombres: No participen en esas organizaciones, estructuras y conceptos que te esclavizan para que seas servil a las mujeres, que te hacen responsable por las mujeres, que te ponen en la posición de ser el único adulto responsable. He mencionado tres en esta oportunidad (matrimonio, trabajos en agencias del gobierno, trabajos en grandes corporaciones) sin embargo hay muchas otras. Yo creo que los hombres quienes son serios con respecto de su liberación van a esforzarse mucho en salirse de estos ambientes esclavisantes y también en crear alternativas que les devuelvan sus vidas. Si es que muchos hombres hacen esto, el experimento retorcido feminista va a colapsar rápidamente tal como una casa de cartas, o sea lo que siempre fue.

Nosotros no deberíamos de dudar al abandonar estas estructuras sociales anticuadas y esclavizantes, porque de hecho nosotros estamos mejor preparados para enfrentarlas y crear estructuras nuevas. El resultado de esta aculturación mencionada arriba, es que los hombres en América ahora están mejor preparados psicológica, emocional, espiritual y físicamente para enfrentar los desafíos, cargas y responsabilidades de las estructuras sociales nuevas. De modo que ¿Por qué dejamos de pasar el tiempo quejandonos sobre de las desigualdades e injusticias en este sistema actal? En lugar de eso enfoquemonos en: como salir de estos sistemas sociales, como crear sistemas sociales paralelos pero separados y como crear nuevos sistemas sociales que sean más igualitarios, más realistas y mejor adaptados a la realidad.

4 comentarios:

  1. Leo todos los artículos y suelo estar de acuerdo con ellos (nótese el "suelo"), pero esta vez he abandonado la lectura a la mitad. Te pediría que agregases formato al texto (negritas y cursivas, más sub-títulos, etc...) para añadir fluidez a su lectura.

    Un saludo

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  2. Entendido, lo voy a editar. Gracias DemonDary, aprecio tus comentarios. Si es que alguna vez estás en desacuerdo con alguno de mis artículos, dímelo por favor. La crítica constructiva me ayuda a mejorar.

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  3. Buenas.

    Por eso se empieza desde la casa no se puede poner al hijo a hacer todo y a la mujer nada, obviamente tampoco se va a poner a la mujer a cargar 120 libras y al hombre a lavar platos.

    y respecto a lo que uno no puede hacer si no tiene la autoridad, pues yo les llamo berrinches y lo que se hace ante un berrinche es ignorarlo y no atenderlo hasta que se pida de la manera correcta.

    (yo trabajo en cafetales los fines de año y ahi si mis respetos, las mujeres son muy trabajadoras y señores de 50 o 60 años lebantan sin problema 100 libras en algunos casos)

    solo te haría la observación de que palabras tan fuertes no deben escribirse, comprendo que es algo dificil,(y lo digo de verdad porque se lo dificil que es el trato con hijas de papi rey del mundo, princesas del universo) pero como personas maduras necesitamos dar el ejemplo.

    buenas noches

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  4. Estimado krlosger, este blog es un intento por cambiar al mundo, tratar de hacerlo un lugar más justo y equitativo, por lo tanto las palabras fuertes a veces si corresponden. Te aseguro que me esfuerzo en respetar a la mujer en todo sentido, sin embargo hay estructuras sexistas que nos están haciendo daño a todos. Mi intención con este artículo es exponer y condenar fuertemente esas estructuras.
    No creo que estas palabras no deban de escribirse, sino que tal vez podrían escribirse con un poco más de tacto. En todo caso espero que disfrutes de este blog y de la perspectiva que ofrece, buenas noches.

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