Hola a todos, aquí Paul Elam, con otro mensaje de una voz para los hombres.
Hace unos años, en otra vida, yo solía enseñar en seminarios y conferencias de educación continua para recertificación profesional.
En una charla en particular yo solía señalar a una pizarra en frente de mi audiencia.
Sin presentarme o decir nada más, escribí en la parte de arriba de la pizarra: “los hombres son…” e invité a la audiencia a completar la frase.
Casi invariablemente lo primero que ofrecieron fue: cerdos o perros acompañados por un montón de risistas. Asentí con la cabeza, anoté en la pizarra y volví con la audiencia, silenciosamente esperando que me den más. Controladores, dijo otra persona tienen miedo de comprometerse dijo otra, agresivos, machos, tienen miedo a la intimidad, violentos, sexistas y hambrientos de poder. Mayormente peyorativos y solo peyorativos vinieron desde la audiencia hasta que la pizarra estuvo llena.
Después le di la vuelta a la pizarra y escribí: “Las mujeres son…” y las respuestas llegaron mucho más rápido que en la oportunidad anterior. Fuertes, capaces, poderosas, sensibles, NURTURING y cosas así volaron hasta el pizarrón como una lluvia de flechas, hasta que estuvo lleno ese lado también.
¿Qué se imaginan que yo pregunté? Tomando una pausa estratégica para tomar un vaso de agua, ¿que dicen estas respuestas respecto a la verdadera naturaleza del sexismo y de la forma en la que vemos a hombres y mujeres? El haberles hecho esa pregunta con palabras los debe de haber dejado fuera de balance, por que la respuesta general a esa pregunta fue, casi invariablemente, una habitación llena de gente en desacuerdo, tenían rostros cognitivamente incapaces de entender y esa confusión le dio paso a la irritación hacía mí a pesar que cada respuesta había sido dicha por ellos mismos. Y por cierto, los que participaron en ese conferencia no eran contadores, enfermeras, profesores, concejeros financieros, eran profesionales de la salud mental, concejeros, terapeutas, trabajadores sociales y profesiones similares. La misma gente a la cual nos gusta imaginamos que posee la objetividad para sobreponerse a la común mentalidad de sesgos y sexismos y esa gente a pesar de nuestra fe en su trabajo, son los menos propensos a hacerlo.
Les puse un poco más de presión y les pregunté: “¿Cómo puede afectar esto a la alianza terapeutica entre paciente y doctor?”, “¿podria esto hacer que las relaciones con los pacientes femeninos las deje incapaces o que sean castigadoras con los hombres?” y siempre la última pregunta que les hacía era:”¿Tenemos sexismo en contra de los hombres de manera conciente o inconciente cuando trabajamos con cada uno de nuestros pacientes?” La ira se intensifica con esa pregunta.
En una charla una trabajadora social saltó de su asiento y lanzó sus papeles a todas partes, me gritó:”¡tú eres el sexista!” salió de la habitación. Luego ella escribió cartas de quejas respecto de mi charla y de mi desacuerdo con borrarla de mi lista de personas que atendieron.
Bienvenidos al loco mundo de la salud mental. Es un estudio profundo de la psicología del odio. Ciertamente, cuando quitamos las capas de fantasía, que cubren esa profesión, llegamos a una conclusión muy molesta: “La psicología es odio”, al menos de la forma en la que es practicada en la cultura occidental.
Esto es más evidente en el mercado de los libros de autoayuda. Desde mediados de los 80s los gurús con intenciones de hacerse ricos rápido, llegaron a las listas de los más vendidos. Libros como el de Robin Norwood “Las mujeres que aman demasiado” o el de Susan Forward “Hombres que odian a las mujeres y las mujeres que los aman” y otros, han sido éxitos en ventas; todos sujetos a estereotipos rígidos de que los hombres odian y las mujeres aman, todas adiciones al pizarrón, que ya está lleno.
Recientemente Marc Rudov, un activista por los derechos de los hombres, apareció en Fox News durante un breve debate con Karen Samuelson, el tema era mujeres ejecutivas, se le dio una presentación bonita que mencionaba su libro nuevo: “Rebotar de regreso” pero pudieron y tal vez debieron, en aras del equilibro, haber mencionado un libro anterior “Como hacer que tu hombre se comporte en 21 días o menos, usando los secretos de los entrenadores de perros profesionales”. Yo no estoy inventando esto, lamentablemente no tengo la necesidad.
Actualmente Phil McGraw, el monarca de insultar a los hombres, es el rey de los ratings y no pasará mucho tiempo hasta que emerja otro, peleando por ser el más grande en la competencia de perros come-hombres. Todo lo que necesitas es una visión preconstruida del mundo y la aprobación de Oprah. Estos son los conocidos en los medios, al menos podemos decir que los hombres y mujeres que atesoran su misandria a cambio de dinero son otro grupo de gente atontada en un cultura atontada por los medios. Los más peligrosos son aquellos que tienen un aire de legiticimidad, estos tipos no solo escriben, ellos enseñan sus investigaciones a los solteros e infectan el mundo, un cliente ingenuo a la vez.
El mundo de la psicología en la academia y la práctica se ha convertido en un arma en el mundo de las políticas de género. Casi toda pretensión a la objetividad e integridad académica se han visto forzadas a la periferia por ideólogas con un resentimiento extra en contra de los hombres y lo usan el horroroso disfraz de profesionales de la auto ayuda para avansar en sus agendas.
Si piensas que eso es extremo, escucha esto: www.allaboutcounseling.com/ es una página frecuente para personas que buscan servicios de salud mental, pero en realidad es un portal, un conducto que induce a las mujeres adentro de la mentalidad que es la plaga de que la masculinidad es la raiz de sus problemas y ofrecen al feminismo como la solución antes de hacer la primera cita. Algunos concejos de su site incluyen cosas como: publicidad detallada de los fundamentos del feminismo y una confirmación de que no todas las feministas son lesbianas y no todas las lesbianas son feministas. Supongo que dedujeron que las mujeres heterosexuales necesitan esas bases y es bueno prevenderlo para sobrepasar las objeciones antes de que surjan. Pregúntale a un vendedor de autos usados. Incluso tienen un segmento promoviendo una nueva masculinidad, estas que se creen Sigmund Freud, dicen tener la clave para reinventar a los hombres y hacerlos mejores, con la implicación de que hay algo defectuoso en la forma en la que los hombres actualmente son y que necesitan una reconstrucción y la primera herramienta para esa reconstrucción es una orden de supresión.
Esta es una de las declaraciones que aparece en su Web site, palabra por palabra: Ellas dicen que los hombres deberían de practicar ser abiertos con sus sentimientos con otros, oh, especialmente con las mujeres, debemos tener una versión crítica de nuestros comportamientos o actitudes, escuchar y escuchar un poco más y solo hablar si la persona que critica desea retroalimentación. Esto ni siquiera es “habla cuando te hablen”, esto es “Cállate y aguántalo”, habla solo cuando tengas permiso de la mujer que te está atacando en ese momento. Que maravillosos son los aspectos más finos de la salud mental.
Allá tienen mucho más, suficientes estadísticas falsas respecto de violencia domestica, violaciones y abuso sexual, que ahora son convenciones y defensas al feminismo atadas al mensaje de los concejos. Su punto principal claramente es que la salud mental para las mujeres depende de aceptar al feminismo y con este, aceptar el odio hacia los hombres. Los mejores concejos que yo jamás había visto para aquellos que buscan amor e intimidad.
En este punto el pizarrón está demasiado lleno de palabras terribles. Y desearía poder decir que esto es lo peor, que hasta ahí llega la infección, pero todavía estamos tratando con los síntomas que con la enfermedad. Entra al web site de la asociación americana de psicología y su división 51, la sociedad para el estudio psicológico de la masculinidad y de los hombres SPSMM, puedes pronunciar a ese acrónimo como espasmo, yo lo hago y creo que si corresponde, a continuación pongo los dos viñetas en su declaración de su misión, desde su página Web: “Nos esforzaremos por erosionar las definiciones de masculinidad restrictiva, las cuales han inhibido el desarrollo de los hombres y su capacidad de formar relaciones significativas y que ha contribuido a la opresión de otra gente”. “Reconocemos la deuda histórica con los descubrimientos sobre género creados por académicas feministas y nos comprometemos a apoyar a grupos tales como: las mujeres, los gays, las lesbianas y la gente de color, quienes han sido oprimidos de forma única por este sistema de género, raza y clase”. El subtexto de todo esto es que el sistema de género, raza y clase se traduce en hombres blancos.
Ahí está lo mejor y la ultima palabra amarga en el pizarrón: “Los hombres son seres defectuoso, asesinos, seres que arruinan los esfuerzos para civilizar a la sociedad y la respuesta para eso es el feminismo. Incluso nuestros mayores expertos en naturaleza humana lo dicen también.
Así es como funcionaban las cosas en la antigua unión soviética. Es sabio considerar que en la era de Gulags y reacciones del puño de hierro a los que están en desacuerdo con las políticas, que la mayoría de los que están en desacuerdo deben de ser apresados en instituciones mentales, por la simple lógica de que si estas en desacuerdo con el estado, debes de tener algún problema mental. También fue una estrategia usada por, y lo voy a decir sin restricciones, el régimen de Hitler, para envenenar la mente de la población con desinformación respecto a los judíos, preparando a la gente para que miren hacia el otro lado mientras los despachaban en nombre de la raza maestra.
Los planes para los hombres, podrían ser menos extremistas y de duración más larga, pero esta sucediendo de todas formas. Se marginaliza a los hombres, año tras año, sus números en las clases de graduados se disminuyen ahora son el 42% de los graduados. Han perdido el 80% de todos los trabajos perdidos en esta reseción, se mueren por suicidio y muchas otras formas que hacen que las vidas de las mujeres parezcan unas vacaciones en Fiji. Es un infierno tener todo este poder, te hace pensar de donde sacamos el tiempo para oprimir al mundo y reírnos mientras lo hacemos. Pero la máquina del odio anti-hombres, sigue avanzando. Sin duda espasmo calificará al movimiento por los derechos de los hombres como una psicosis masiva y los activistas por los derechos de los hombres son sociópatas individuales.
Recuerdo con una sonrisa en mi rostro a esa trabajadora social que hizo ese berrinche en mi charla, fue una imagen graciosa, pero eso fue hace algunos años. En ese momento yo sabía que el sexismo estaba ahí, pero no estaba tan intrínsicamente incrustado en la sociedad como lo es el día de hoy e ingenuamente yo pensaba que algún día se iría y ya no sonrío más al respecto.
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