Misandria Popular
Por Typhonblue
Escuché el sábado en el
programa de radio de costa a costa y una
mujer dijo que el patriarcado es la razón por la cual todo anda mal en el
mundo. Y que el hecho de que los hombres estén a cargo es la razón por la cual
hay violación y tortura y los hombres han hecho del mundo un embrollo. Ella
termino diciendo que las viejas religiones de la diosa eran pacíficas porque
“las mujeres son comunales.”
Debería de notarse que ni los
invitados ni el anfitrión estuvieron en desacuerdo con esas declaraciones y el
anfitrión asintió con la cabeza con entusiasmo. Ambos eran hombres.
Encuentro que ese tipo de
declaraciones, que las mujeres son no violentas y que los hombres son monstruos
violentos, como algo increíblemente irónico.
¿Por qué? Porque avergonzar es
violencia. Y lo que ella estaba hacienda es visitando violentamente a otros.
Es como mirar a alguien darle
una paliza a otra persona por no ser un pacifista.
Debería de notarse que este
tipo de misandria popular es permanente y raramente desafiada. Eso significa
que esta sociedad, la cual de acuerdo con ginecocentristas está oprimiendo a
las mujeres, en realidad está dándole palizas psíquicas a los hombres.
Voy a practicar mi risa en este
momento.
Misandria Popular: hombría
Voy a ofrecer una idea radical
inspirada en el artículo anterior sobre misandria popular.
La hombría en sí misma es un
sistema social arcaico de avergonzar a los hombres para controlarlos. Ese
precisamente es el propósito; funciona como cabestro y brida. O, más bien
dicho, como látigo y espuela.
Lo que hace toda la estructura
de la hombría es infligir dolor (vía la vergüenza) a los hombres por no lograr
estos estándares arbitrarios e imposibles (decididos para el bien de todos
excepto del hombre en cuestión) mientras ofrece leve alivio cuando un hombre
“hace lo correcto” es decir, se olvida de sus propios intereses para
proveer/ser fuerte/¿sacrificarse por otra persona?
Lo que significa que la toda
la identidad de género de los hombres, es definida externamente, es equivalente
a una extorción violenta practicada al cuerpo masculino por parte de la
sociedad. Cada sistema de vergüenza específicamente masculina se forma a partir
de esto.
En todo caso, es algo para
pensar.
**Actualización** Y aquí hay
un post excelente de Grapeban (ella y yo usualmente peleamos pero debo de darle
reconocimiento cuando es justo):
Estoy de acuerdo con la mayor
parte de lo que dices.
Es decir, siento que cada rol
social encaja en esta idea, pero es particularmente relevante para los hombres.
Tenemos este estado en el que
el ESTANDAR SUPREMO DE LA HOMBRIA, el cual deben de alcanzar todos los hombres
o sino serán juzgados como no tan buenos como el promedio. Y esto está en capas también, como las cebollas. Primero tienes a un
cuerpo masculino, el cual no es lo suficiente para identificarte como un hombre
en tu mente. Entonces tienes que ser heterosexual. Entonces tienes que ser
blanco. Entonces alto. Entonces fuerte. Entonces tienes que disfrutar pelear. Y
los deports. Perder tus emociones. Dominar todo a tu alrededor. ¿Ya hiciste
todo esto? Bien hecho, todavía no eres tan masculino como el hombre de allá,
¡ENTONCES SE MÁS MASCULINO MARICA!
(Nótese que la lista de características masculinas no las publiqué en
el orden oficial, tan sólo las listé, no nos metamos en las olimpiadas de la
opresión ¿de acuerdo?)
Y entonces hay algunos hombres quienes llegan muy cerca de estos
requisitos nebulosos y estos son los que hacen que el problema sea peor. Si no
miran con desprecio a los hombres sub-par, entonces la sociedad los idoliza y
los usa como el estándar para juzgar a otros hombres.
Odio hacer referencia a cierto ensayo de George Orwell, ya que es la
segunda vez que lo he hecho en subreddit, pero hay un ensayo de George Orwell
en el que pensé cuando leí esta frase:
Estándares arbitrarios e
imposibles (decididos por cualquier excepto el hombre en cuestión)
En el ensayo (http://orwell.ru/library/articles/elephant/english/e_eleph)
Orwell habla sobre el Imperio Británico,
y como las expectativas puestas para dominar a los nativos de India y ser
fuertes, los puños de hierro son los que convierten al Imperio Británico en una
marioneta de los nativos. Porque son los nativos quienes deciden que es fuerte,
y un puño de hierro en realidad si es fuerte.
Y ese fue el momento, en que
me paré con mi rifle en mis manos, en que empecé a entender lo vació, la
inutilidad del dominio del hombre blanco en el este. Aquí estaba yo, un hombre
blanco con su arma, parado en frente de una multitud de nativos – aparentemente
el actor principal de esta obra; pero en realidad yo era una marioneta absurda
manipulada de un lado al otro por la voluntad de esas caras amarillas de atrás.
Yo percibí en ese momento que cuando un hombre blanco se convierte en un tirano
destruye su propia libertad. Él se convierte en una marioneta vacía, la figura
convencionalizada de un sahib. Porque condición de esta regla es que él va a
pasar su vida tratando de impresionar a los “nativos” y por lo tanto en cada
crisis él tien que hacer lo que los “nativos” esperan de él. Se pondrá una
máscara, su cara se acostumbrará a ella. Yo tuve que dispararle a un elefante.
Tuve que comprometerme a hacerlo cuando iba por el rifle. Un sahib tiene que
actuar como un sahib; él tiene que dar la apariencia de resolución, de saber lo
que hace y ser muy decidido. Para llegar hasta allá, con rifle en mano, con dos
mil personas marchando detrás de mis talones, y entonces viajar lejos, sin
haber hecho nada – no, eso era imposible. La multitud se reiría de mí. Y toda
mi vida, la vida de cada hombre blanco en el este, tendría que luchar para que
no se rían de él.
Cuando tenemos al HOMBRE SUPREMO como el ser más grandioso sobre la
tierra en una sociedad (busquen las alabanzas a figuras como Chuck Norris,
Teddy Roosevelt, seguro, mucho de esto son bromitas, pero están basadas en la
idea de que la masculinidad es valorada por sobre todo lo demás), terminamos
condenando a los hombres que intentan
cumplir con este roll de ser masculinos y lo que es o no es masculino, es decidido por el observador, no
por el actor. Y cuando los hombres inevitablemente fallan en cumplir con este
roll, son tratados como menos que perfectos y por lo tanto irrevocablemente
fallidos. Como el Imperio en el ensayo de Orwell, la vida de un hombre en la
sociedad es una lucha larga para que no se rían de él.
Muy buena la entrada sigo leyendo los post del blog aunque no pase mucho a comentar, a proposito más material para el blog:
ResponderEliminarLa matanza de Batman:
http://www.cuantarazon.com/crs/2012/07/CR_697981_ellos_fueron.jpg
El drama de este padre que es tan similar al de los casos presentados en el blog, lo que más me sorprendió es que ocurrió en mi país, Perú:
http://www.youtube.com/watch?v=Mwev1Uev2S4