sábado, 26 de junio de 2010

Korte

Hola a todos, aquí está Paul Elam llegando a ustedes otra vez con otro episodio del misoginista feliz. El día de hoy voy a hablarles del sistema de las cortes de la familia.

La corte de la familia es un lugar a donde vas a ser forzado a ir cuando el éxtasis matrimonial se destruya, se ha convertido en el derby de las demoliciones para las familias en problemas. Es una galería de tiro, donde los niños y los padres se los arrasa para que las mujeres y los abogados les disparen. No para perseguir justicia, sino porque la masacre misma es un negocio muy rentable para la gente equivocada.

Este no es un escenario endémico al divorcio, no es lo mejor que podemos hacer con el sistema que se basa en buenas intenciones, es un sistema malo que hace cosas malas por todas las razones equivocadas, la más común es el dinero.

El sistema de las cortes de la familia ha evolucionado o involucionado, dependiendo de cómo lo mires en un teatro de los malditos, donde la infamia y la mentira son considerados buenos reproductores, donde los niños, padres y familias, son explotados rutinariamente.

Los oficiales de la corte rápidamente le dicen a cualquier interesado que ellos actúan en el mejor interés de los niños, incluso practican decirlo en un tono sagrado. No te lo creas. Las cortes se tratan tan sólo de dos cosas: Dinero y Ganar, en ese orden. Incluso saben quien va a ganar antes de que la contienda empiece, el único misterio real es el golpe final.

¿Y los niños? La búsqueda de que es lo mejor para ellos es lo primero en irse, son tan desechables como un pañuelo de papel. Eso es lo que pasa cuando los convierten en propiedad y los usan como herramientas de negociación junto a la casa, los autos y las cuentas bancarias y cuando los pones a merced de jueces y abogados, estos no los ven como niños que van a ser traumatizados por sus familias, sino como blancos en un juego de tiro al blanco de una feria.

El juego del dinero va mucho más profundo que el bolsillo promedio, Carol Roades, la autora del altamente recomendado libro “Amigo de la Corte, Enemigo de la Familia”, estuvo involucrada con las cortes de la familia por 20 años. Ella es una antigua ejecutora de la corte de la familia e investigadora para la corte 37 de la familia de Michigan. Su considerable experiencia en un sistema supuesto a buscar los mejores intereses de los niños, en realidad era lo opuesto. “Todo lo que importaba era el dinero” dijo Carol Roades, Como obtener los dólares federales que se ganan con cada caso por ejecuciones, de hecho ella continua “Nuestro director decía con frecuencia ‘no somos los amigos de la familia, somos los amigos de la corte’” en su libro ella describe como se incentivaba incluso forzaba a los que trabajaban en los casos a pedir incrementos en la manutención infantil, porque eso significaba mayores ingresos para la corte. Ella detalla como se manejaba la oficina con la filosofía de engaños y un enfoque en ingresos económicos en lugar de los intereses de las familias; era un sistema que enterraba quejas sobre derechos de visita porque no había dinero en reforzar los derechos de los padres visitantes o en actuar protegiendo los intereses de los niños a quienes los padres estaban siendo prohibidos de ver.

Al final la corte 37 se convirtió en un éxito muy grande para generar ingresos económicos que se convirtió en una maravilla a emular para otras cortes del condado y del estado, quienes estaban muy felices de imitar sus prácticas. Recolectar el dinero de familias rotas no está limitado a cortes de la familia y a abogados.

El doctor Steven Baskerville en su libro “Llevado en Custodia”, también expone la corrupción rampante en el sistema entero. Baskerville señala que los psicoterapeutas, trabajadores sociales y varias agencias sociales también son una parte del juego. El nos advierte y recuerda que consideremos “El divorcio involuntario necesita de agentes gubernamentales removiendo forzosamente a gente inocente de sus hogares, adueñándose de su propiedad y separándolos de sus niños. Requiere supervisión a largo plazo de la vida privada, hecha por funcionarios del estado incluyendo la policía y la cárcel”.

Es evidente, después de investigar y de usar el sentido común, que estaría en los mejores intereses del niño mantener una relación cercana y amorosa con ambos padres sin importar que el matrimonio haya colapsado. No sólo dejar que los padres cuiden a los ninos, es más deberían de insistir que sigan cuidándolos, incluso si el matrimonio ha terminado. Las cortes podrían hacer que esto sucediese, si es que acaso estuviesen interesadas en el bienestar de los niños. En cambio lo que suele suceder es el primer golpe a la familia, efectuado por la corte: “La orden de restricción” casi siempre al padre. Las emiten sin pruebas ni corroboración, no para proteger a los ninos, sino para llevar a la familia al camino de órdenes de manutención infantil y el dinero que la corte gana al ejecutarlas.

Lee los libros de Roades y de Baskerville, todo lo que he dicho está ahí.

Pelear con el proceso es truculento, Roades nos informa que cuando los hombres que conocían sus derechos o activistas por los derechos de los padres iban a la corte, se pasaba la voz de antemano y estaban marcados para recibir toda la ira punitiva que los jueces disponen de forma considerable. Todo esto es parte de proteger el juego, buscando el mejor interés de la corte más bien dicho.

Y ¿el sesgo a favor de las mujeres como mejores guardianas de los niños como en los días pasados? Encaja perfectamente con las maquinaciones de las cortes actuales. Nada hace que las peleas arregladas sean aun más fáciles de ganar que tener un ganador designado de antemano. Nadie tiene que lanzarse en un clavado cuando los jueces ya tienen el resultado en la mano antes de la ronda inicial. ¿Los mejores intereses de los niños? Ciertamente.

Si esto parase en el dinero, ya sería suficientemente malo, sin embargo ese no es el problema. La corte atrapa a Mamá y Papá como adversarios de toda la vida, ellos continúan sus batallas después del divorcio con la dedicación de Palestinos e Israelíes. Sus niños ¿Los recuerdan? Quedan atrapados en los disparos de la batalla.

Seamos muy claros respecto a que significa “Custodia de los Niños”, se traduce literalmente a “Propiedad”. No es sólo la habilidad de controlar cuando y donde Papá puede ver a los niños y cuanto le pagará a Mamá y a las cortes por el privilegio de ver a los niños, conservadores de propiedad tienen el poder unilateral de eliminar las visitas y al vínculo padre-hijo con impunidad, la corte les da ese poder. Diariamente tienen la oportunidad y frecuentemente el deseo de asesinar el personaje del padre ausente, de retorcer la memoria del niño y su percepción como si fuera igual al de la madre amargada. Con el tiempo los padres pasan de ser Papi, a ser un visitante, a ser un extraño, a ser un recuerdo y probablemente un recuerdo no muy bueno. No es poco común, tú conoces gente a quienes les ha pasado esto o algo similar.

La próxima vez que escuches a alguien quejarse de que Papá ni siquiera trata de pasar tiempo con los ninos desde el divorcio, considera que es a lo que él se enfrenta cuando pasa tiempo con los ninos.

La pequeña Sarah Jane quería hacerle una pregunta a su padre: “Papi ¿tu le pegaste a Mamí?”. El Papá responde “No cariño, jamás haría algo semejante” Sarah Jane responde “Mamí dijo que lo hiciste y que por eso es que tienes que irte”. El Papá responde “Bueno cariño, jamás lo hice” Sarah Jane “Papi”- “¿Si cariño?” – “¿Me vas a pegar a mi también?”.

Él no puede pelear contra esto, él no tiene suficiente tiempo parental para dar el balance necesario a la vida de su hija, las cortes se han asegurado de esto, la ex lo sabe y lo usa. Es fácil decirle a Papá que necesita ser un hombre y dejar en paz la mente de su hija envenenada con odio en su contra, sin embargo si lo hacemos no estamos más preocupados por los mejores intereses de los niños que las cortes y algunas de las madres.

En la conversación que acabas de leer, la niña es quien más sufre. Ella está siendo condenada a una visión de los hombres y los padres que va a manchar todas y cada una de las relaciones que ella tenga por el resto de su vida.

Reestructurar una familia es un asunto delicado y difícil, pero va a ser más difícil de lo necesario hasta que reestructuremos o eliminemos al corrupto, arrogante y destructivo sistema de cortes de la familia que tiene este tipo de poder sobre las familias.

La panacea no existe, sin embargo sacar al gobierno del matrimonio y del divorcio sería una buena idea. En ausencia de esto, remover incentivos para que las cortes exploten familias destruidas sería un comienzo excelente. Las acusaciones falsas permiten a las cortes obtener “ordenes de restricción” deberían de generar tiempo en la cárcel para quien acusa falsamente y los jueces deberían de ser removidos de sus cargos y procesados por amputar una relación entre padre e hijo sin pruebas y razones; eso es abuso infantil, así de simple. Y tristemente ilustra que lo que necesitamos desesperadamente son jueces con integridad y pasión por la justicia, lo que tenemos en realidad son legiones de Tony Sopranos en batas negras.

Gracias otra vez, por mirar y escuchar otro episodio del misoginista feliz. También quiero tomar la oportunidad para agradecer a mucha gente que me ha enviado emails de apoyo y especialmente aquellos quienes han presentado estos videos a quienes los podrían mirar y obtener otro punto de vista a lo que esta sucediendo en este mundo loco.



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