Hola a todos, aquí Paul Elam, llegando a ustedes desde el misoginista feliz. Normalmente trato de suavizar la retórica en mi trabajo, pero el día de hoy estoy de humor para una diatriba. He sido un activista por los derechos de los hombres por casi 20 años, recientemente me he sentido muy complacido con el surgimiento de voces de hombres y mujeres que ya se cansaron del feminismo, particularmente en el Internet y en lugares muy particulares como Youtube. Es refrescante y gratificante que cada una de las mentiras que las feministas han propagado por 40 años se las lanzan a la cara.
Pero tengo que decir ahora que es el momento de parar. Verán, las feministas son como las hemorroides y la verdad es como un tubo de PREPARATION H. Cada vez que veo a estas mujeres y alguno que otro hombre darles una buena dosis, ellas se encogen fuera de vista.
Y se pueden salir con la suya haciendo eso, después de todo la hegemonía de las feministas en la academia, la ley, la prensa y la opinión pública, es casi total. Ya no necesitan defender sus ideas con justicia.
De modo que el verdadero problema que tenemos, ya no es el feminismo, son los hombres, no estoy hablando de los activistas por los derechos de los hombres, sino de un tipo cualquiera. Así que hoy voy a hacer un poco de ataques a los hombres. Y hoy los hombres se merecen mis ataques, mucho más que las feministas. No estoy aquí para reforzar las ideas estúpidas sobre los hombres que las feministas han esparcido por tanto tiempo, pero si voy a señalar las acciones estúpidas que los hombres hacen y que permiten que las feministas consigan más poder.
Chicos, hemos tenido una guerra de género y ustedes ni siquiera se presentaron. Mientras que los hombres, y me refiero a ti, a tus hermanos, padres, hijos y amigos, han sido violados en las cortes de la familia, tu mirabas hacia el otro lado. Mientras tus hijos son marginalizados y se quedan cada vez rezagados en un sistema educativo cada vez más centrado en las necesidades femeninas, tu has reaccionado asegurándote de saber cuando es el próximo juego de pelota. Mientras que los medios te han representado como un idiota unidimensional en comedias, mostrándote como un idiota que no puede atarse los zapatos sin la supervisión de su esposa, tu has validado ese tratamiento de idiota al tolerarlo.
Has leído revistas de mierda como Men’s Health para que puedas aprender a tener abdominales bien definidos y atraer a las princesas más superficiales y moralmente vacías, quienes se van a revelar a tus modales complacientes y serviles solo para que te puedas acostar con ellas. En cinco años en el futuro, cuando esa perdedora con la que te casaste te robe a tus hijos, tus ingresos, tu propiedad e incluso tu dignidad, entonces tu mejor amigo te va a consolar con algo tan profundo como: “amigo, eso es terrible ¿quieres una cerveza?”. Esto les va a suceder a más de la mitad de aquellos que se case, pero estás demasiado entupidamente absorto en tu basura para deducirlo. Y estás criando a tus hijos para que les pase exactamente la misma basura.
Esto es suficiente como para que alguien te diga: “¡Despierta de una maldita vez!”. Y ¿sabes algo? Ese es el discurso largo, la mayoría de ustedes no es que están dormidos, están en un maldito coma; están anestesiados en una existencia sin pensar y por una de las pocas cosas que las feministas han dicho de ustedes y que es cierta, ustedes piensan con el pene. Y ¿saben algo? Aunque no les guste admitirlo cuando piensan con el pene lo primero que hacen es perder las bolas y el valor.
Y así es como viven la mayoría de ustedes, en la servidumbre dictada por el pene, focas entrenadas, temerosos de hacer o decir cualquier cosa que haga que la princesa se enoje con ustedes o que, Dios no lo permita, les haga imposible tener sexo.
Personalmente he visto suficiente de esto como para que me dure toda una vida. Aquí hay hombres que pelean una batalla cuesta arriba que ustedes ni siquiera pueden imaginarse. Solo para que tengas una pequeña posibilidad de justicia, cuando la esposa llama al estado para que disuelva el matrimonio y los activos. A estos hombres no les debes nada, pero si pudieses sacar tu cabeza de tu trasero por cinco minutos, piensa en lo que le debes a tus hijos.
Muchos de ustedes ya han sido destruidos en las cortes de la familia y aún así están criando a sus hijas para que sean princesas con demasiados privilegios y a sus hijos para que sean las mulas que van a cargar el peso por ellas a través de la vida, solo para ser descartados cuando ya están demasiado usados. Y de todas formas estás más interesado en un televisor de pantalla grande que en el problema que describo, esto es jodidamente patético.
Esta ignorancia a propia elección es fatal. Los hombres mueren de todas las causas de muerte principales, en comparación con las mujeres, y las mujeres reciben una serie de programas de investigación para problemas de salud específicos para mujeres. Las mujeres viven 7 años más que los hombres y a pesar que las mujeres tienen una oficina dedicada a su salud desde hace décadas, recién empezamos a oír de que va a existir una para hombres.
Tal vez no te importa un comino si te mueres de un infarto al corazón o de cáncer a la próstata antes de que cumplas 60 años, pero si tienes un hijo al menos dale la oportunidad de que el sepa que no te importa un comino si el también se muere.
Imagino que a muchos de ustedes no les agrada lo que tengo que decir, tan solo imagínense mi preocupación al respecto. Pero si te he hecho enojar no será por mucho tiempo, tan solo necesitas de 15 minutos de actuar como un tonto cerca de la feminista más cercana, la cual te va a dar unas palmaditas en la cabeza con mucha gentileza, mientras te dice que “eres un niño bueno” y entonces te vas a sentir muy bien.
Pero si estás tan molesto que quieres hacer algo al respecto, entonces tengo una sugerencia: en lugar de comprar esas entradas para el juego de pelota o ese paquete de cerveza, envía ese dinero a una organización que pelee por los derechos de los padres, la cual hace lo que tu no tienes el valor para hacer. O ¿Qué te parece esto? La próxima vez que escuches a una mujer decir algo estúpido en contra de todos los hombres, dile algo al respecto y esta vez no digas algo que exprese que estás de acuerdo, solo para que te ganes el favor de las mujeres. Pero si no puedes hacer nada de eso, por favor mantén la boca cerrada, ya a estas alturas has de ser bueno en eso, lo has hecho durante mucho tiempo para complacer a las mujeres.
Aquí hay hombres que intentan hacer algo por tus hijos, algo que tu no vas a hacer, ya hay suficientes obstáculos en el camino, lo ultimo que necesitamos es a un ignorante jodido que nos ayude a detenernos.
Como dije antes, las feministas ya no son el problema, ellas perdieron la guerra de género y los hombres, en lugar de pelear siguieron ciegamente por miedo y por programación biológica. ¿De que otra forma podríamos llamarlo si no es ceguera? Cuando los hombres tienen toda esta injusticia a su alrededor y reaccionan de una forma colectiva diciendo: ¿Qué te parece vaquero?
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